Surfeando en el desierto de Atacama

Surfear en el desierto es una experiencia única, donde corres olas solo tú con tus amigos, en lugares muy buenos y secretos, en los cuales aumentas tu nivel como si estuvieras en una cámara del tiempo. Un viaje que hago frecuentemente como  fotógrafo acuático, en un desierto con olas perdidas que para muchos son leyenda y donde los cielos entregan un panorama hermoso, de estrellas incandescentes.

Texto y Fotos: Andy Díaz.

Hace tiempo veníamos poniéndonos de acuerdo con un nuevo amigo del surf de ir a recorrer las comentadas y secretas olas de la III región. Al rato concretamos nuestros deseos y saliendo de Coquimbo y La Serena partimos visitando, primero que todo, la famosa y escondida ola de La Vedette una izquierda de clase mundial que la mayoría de las veces corre sola, ubicada en los recovecos costeros en las cercanías de Huasco; fue ahí donde pasamos la primera noche. Al otro día achicó, así que partimos rumbo al norte. En cada punta, el mar nos quería decir algo, en algunas nos mostraba explícitamente sus olas.

Al atardece llegamos a la perdida y secreta ola de Grandes Ligas, ¡de verdad que está ultra escondida! Llegas a un lugar en la mitad de la nada, poco antes de Caldera, donde no hay ninguna señalización, solo unos pequeños indicios geológicos que me dieron los pro y que guardo celosamente. Hay que recorrer como 7 km. por un camino malo hacia una punta gigante donde jamás pensarías que existe una ola; cuando bajas una especie de cerro arenoso, a punto de decir “estamos perdidos”, aparece una derecha y quedas perplejo. Es una ola increíble en la mitad del desierto, a kilómetros de alguna persona y solo para ti.

Villa Alegre

La exigente Grandes Ligas nos pidió un par de días. Luego de eso y siguiendo camino más al norte pasamos inmediatamente una de las bahías pequeñas mejor protegidas que he visto en mi vida. El fondo está lleno de piedras largas salientes, lo que para los buceadores de seguro sería como volar entre edificios.  Con unas 3 horas más de viaje, pasamos por un zoológico de piedra –delfines incluidos- para escalar unas rocas ideales para boulder, con agarres perfectos y problemas para todos los niveles. La verdad que este lugar es buenísimo y está virgen. Son monumentos naturales junto a la carretera, accesibles cuando vayan saliendo de Caldera al norte, solo 5 minutos en auto, a mano derecha y donde lo indican unos carteles verdes. Les aconsejo que pasen con la familia, la visita es corta y sin duda quedaran fascinados.

Más al norte y ya a menos de 30 km. de Chañaral, se llega al lugar que anticipaba como una verdadera cámara del tiempo, Villa Alegre.  Puedes surfear una semana y es como correr un mes completo en tu ola típica, lo que hace aumentar tu nivel de forma significativa. Villa Alegre es una especial ola que te da tiempo para pararte y todo, luego se arma y te otorga una emocionante pared perfecta, donde solo puedes fallar tú. Si eso te pasa vas directo a las rocas. ¡Por algo también se le conoce como Villa Muerte!

Sufriendo falta de compañía

En mi último viaje fui a Portofino a registrar el training de ocho chicas locales de la IV región, que incluso hicieron un mini campeonato de surf y body board (17-20). Luego se fueron a jugar con una balsa de totora a una pequeña ensenadita, por la cual Portofino lleva su nombre. En esta verdadera piscina las chicas se entrenaron bajo el agua, se tiraron piqueros, bucearon y se relajaron.

Estar en el desierto es desconectarse de la vida normal de ciudad, si bien no tienes agua ni luz, vuelves a lo básico, donde disfrutas completamente de la naturaleza, te riges por los horarios de luz, quieres pasar todo el día surfeando y poca hambre te da. Un lugar donde las playas son blancas, el sol brilla casi todos los días y hace calor, haciéndote sentir que estas en un paraíso perdido. Los atardeceres son rojos y las estrellas brillan con indescriptible potencia, tanto que incluso llegan a asustarte. Finalmente te vas a dormir a metros del mar, escuchándolo como si fuese una canción de cuna, que te hace  soñar con olas, contándole a tu subconsciente las olas que te regalará mañana…

Alrededor de Portofino

-En Portofino puedes quedarte en las mejores cabañas de Portofino, full equipadas, con agua y luz, que están junto al mar. Acá va la sitio web.

-También puedes quedarte -con el beneficio de estar frente a las olas- en las cabañas de Rodolfo Kempaer, que son más baratas. Fono: 89288477

-Hay una escuela de surf dirigida por una de las leyendas de surf chileno: Cristian “Chico” Ramos; lo ubican ahí mismo, ¡no se mueve de Portofino!

-También puedes escalar en las rocas sobre el pueblo, además de hacer paseos familiares a las paradisiacas playas de arena blanca de los alrededores con excelente buceo. Los mejor de todo para hacer con la familia es visitar  el cercano Parque Nacional Pan de Azúcar, donde puede ver flora y fauna del desierto, junto con pasar una increíble tarde en su extensa playa Pajaros… ¡dónde también se puede surfear!