Las chaquetas de polar pueden ser usadas como capa intermedia (segunda capa) o como capa exterior, dependiendo de las condiciones climáticas del lugar donde te encuentres y la actividad que vayas a realizar. Su propósito es abrigarte y ser aislante para que no pierdas el calor que tu cuerpo genera.
Al elegir esta prenda -teniendo en cuenta qué uso le darás y cómo vas a combinarla con otras capas-, debes fijarte en que su forma y materialidad sean las apropiados para tu cuerpo y para la libertad de movimiento que necesitas.