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¿Qué tomar en cuenta para escoger una mochila para carreras de aventura?

Las carreras de aventura siempre son muy distintas entre sí. Si bien todas te exigen material obligatorio (botiquín, manta de emergencia, vivac, etc.), este variará o aumentará de acuerdo al lugar en que se realice dicha carrera y a la duración de ella; tomando en cuenta esto, a veces no es fácil encontrar una mochila que cumpla todos los requisitos que necesitamos para estar cómodos todas las horas o días que debamos cargar el equipamiento que se requiere y que además no nos perjudique en ningún aspecto.

Katherine Cañete Arredondo es una corredora de carreras de aventura, ultratrail running y carreras de obstáculos. Titulada de Profesora de Educación Física con Mención en Actividades en Contacto con la Naturaleza en la Universidad Católica del Maule. Realiza asesorías en equipamiento a corredores principiantes. Actualmente trabaja en su empresa Comercial Outsoul Limitada.

1. Tamaño de la Mochila

Tu mochila no debe ser ni muy pequeña ni muy grande. Una vez que ya sepas todo el equipamiento que debes cargar por, súmale la cantidad de comida, hidratación y abrigo que agregues por tu gusto y que te hace sentir seguro para no tener bajas en tu rendimiento. Es cierto que quizás en algunas mochilas de 10 a 12 litros y usando elásticos externos puedes meter todo, pero imagina que te toca una revisión de algo de material obligatorio y está al fondo de la mochila: vas a tener que sacar todo para poder encontrar una sola cosa. Lo ideal es que puedas sacar lo que necesites sin tener que sacar nada. Tampoco tiene que ser una mochila gigante ya que todo lo que sobre será peso extra o hará que el equipamiento que está dentro ande de un lado para otro y te moleste al correr. Si es grande la mochila que encuentras fíjate que tenga cintas de compresión para que las cosas no se muevan dentro y también fíjate en su peso. Ojalá sea de materiales ligeros y resistentes.

 2. Varios bolsillos con accesos fáciles

Te ahorrarás mucho tiempo si los accesos a los bolsillos de la mochila son sencillos, es decir que no tengas que hacer de contorsionista si estás parado o andando tratando de sacar algo. Ojalá la mochila tenga bolsillos delanteros amplios y seguros donde puedas guardar las cosas que necesitas sacar rápidamente. Hay mochilas que tienen bolsillos por los costados; si escoges de estas mochilas, trata que esos bolsillos laterales te queden justo en tus costados y no del costado hacia atrás, porque cuesta abrir y cerrar un bolsillo que queda muy atrás. También hay que tener en cuenta que tenga compartimiento para la bolsa de hidratación y que sea de cómodo acceso y a la vez no cueste rellenar la bolsa de hidratación cuando ya está en su interior. Ojalá con bolsillos laterales o en la espalda de malla elasticada: sirven para ir depositando ropa que te quieras sacar o también de basurero.

3. El contacto con el cuerpo

Hay muchas mochilas que son muy buenas y cuentan con grandes características, pero hay un punto que a veces lo dejan medio olvidado. Agradecerás cuando encuentres una mochila que no te cause daño por roce en zonas como el cuello, los hombros, la espalda y otros. Varias veces me pasó con mi segunda mochila que en la zona del cuello, después de muchas horas de roce y cargando varios kilos de peso, terminaba casino online con heridas o quemaduras. En cuanto a la tela respirable, hay mochilas que poseen mallas que son muy suaves y sus tramados dejan salir muy rápidamente la humedad, también hay algunas con paneles separados de cargamento que facilitan aún más la evaporación y también hay otras que poseen un tipo de tela con forma de huevera entre la malla y el cargamento, que también disipan muy rápido la transpiración y te mantienen la espalda cómoda.

4. Un tela resistente

Es sabido que muchas de las carreras de aventura tienen pruebas en las que hay que pasar por bosques muy tupidos, matorrales, espinos, cursos de agua dulce y salada y un sinfín de terrenos que no muchas mochilas resistirían, por ello necesitas una mochila que tenga una tela resistente ojalá con tejido rip-stop. Si se engancha en algo o se rompe, se detendrá rápidamente la rajadura. Lo otro es que una mochila impermeable y liviana puede quizás ser cara o difícil de encontrar, pero puedes comprar una mochila resistente al agua y comprar un cubre mochila si es que esta ya no lo trae incorporado. En el mercado también puedes encontrar mochilas resistentes al agua y con algún bolsillo que es completamente impermeable, para guardar aparatos electrónicos.

5. Cierres

Trata de encontrar una mochila que no tenga cremalleras o muy pocas: no todos las cremalleras son buenas y tienden a fallar fácilmente cuando se mojan constantemente, por lo que te recomiendo una mochila que en el compartimiento principal utilice otro tipo de cierre, puede ser con cordones elasticados y tancas con resorte, un sistema de bolsas estancas con enrollado y clip, hebillas para mochilas etc. Si tienes un problema con el cierre puede que te encuentres llevando tu carga en la mano o que pierdas la mitad del contenido.

6. Talla

La mochila tiene que ser de tu calce, ya que si te queda pequeña estarás incómodo todo el rato y si te queda grande, nunca podrás ajustarla a tu medida, por lo que se balanceará para todos lados y/o rebotará, y seguramente no quieres terminar con quemaduras por roce. Trata de llenarla antes de comprarla y pruébala con algo de peso. Ve si te queda cómoda, que no te aprieta, que no existan lugares en los que pueda haber roce, tu mochila tiene que ser lo más cómoda posible porque pasarás tantas horas con ella que debe convertirse en una extensión de tu piel.

KC