Marcos Gallegos, kayakista: «Trato de involucrar a más gente en este deporte»

En días que preparaba el Nacional de Slalom, este deportista de nivel mundial, que comenzó practicando a los 18 años y hoy es atleta de Jackson Kayaks, nos explica cómo se aproxima su temporada 2014.

Entrevista: José Francisco Hurtado / Fotografía: Sara Jean

Cuéntanos alguno de los momentos que más te han marcado en tu disciplina

Hace como 3 años, en los días que estudiaba Construcción en Canadá y estaba trabajando para poder seguir con mis competencias, Patrick XX, que es entrenador de grandes competencias y entrenador en el White Water Grand Prix, me llamó en la noche y me preguntó si quería ser parte de Tribe Rider, una liga de kayakistas. Me preguntó si estaba entusiasmado y quería ser parte de esta familia, que está repartida por todo el mundo y congrega a los kayakistas más completos que existen de todos los continentes. ¡Para mí eso fue lo mejor que podría haber recibido como regalo de Navidad! Quedé súper fascinado. Son esas cosas que tú necesitas como para conseguir lo que quieres, un reconocimiento muy grande para mí, que me ayudó mucho a seguir con más fuerza en el deporte.

¿Cómo es tu año en el agua?

Hace 3 años, desde mediados de abril hasta mediados de octubre trabajo y compito en Norteamérica. Cuando vuelvo a Chile, paso por el Cajón del Maipo, donde practico un poco de kayak; luego, entre octubre y diciembre, me muevo hacia Pucón, donde trabajo enseñando kayak y kayakiando obviamente. Y después, enero y febrero, me muevo a Futaleufú. Desde ahí bajo el rio Baker. Ahora último bajamos hasta el rio Bravo, en Villa O’Higgins y después vine de vuelta a Futaleufú para el FutaFest. Luego vuelvo a Pucón, más o menos en marzo.

¿Cómo trabajas con tus sponsors?

No hay que ser un súper buen kayakista, pero tienes que empezar a saber que, para conseguir un sponsor, necesitas trabajar, escribir y enviar fotografías y videos. Hay un momento en que empiezas a saber que tu carrera se está convirtiendo en tu pasión, pero también en tu trabajo, y que tienes que hacerlo de buena forma para conseguir el patrocinio que tú necesitas. Yo tuve la suerte que en mi segundo año que llevaba en  Canadá conocí gente que tenían una tienda outdoors en el centro de Ottawa que sabía que yo estaba muy motivado con el kayak. La verdad es que también estaba haciendo por mi parte cosas bien difíciles y la gente me fue conociendo un poco por eso.  El dueño se acercó a mí y él me ofreció si quería representar a su compañía. Y yo estaba feliz. Porque sabía que para llegar a donde yo quería ir necesitaba equipo: ya no podía seguir costeándolo con el dinero que tenía, que era muy poco. Y ahí me empezaron a ayudar con un poco de equipo, con kayak, y todo lo necesitaba para poder hacer mi temporada.

De a poco fui sacando imágenes, fotografías, y fui metiéndome en competiciones, buscando a las compañías que yo quería representar, con el equipo que a mí me gustaba, las marcas de kayak que yo siempre usé,  y de las que quería ser parte, como Jackson Kayaks. El año pasado pasé a ser parte del team Jackson que realmente es una compañía increíble, que me satisface mucho como remador.

¿Qué puedes hacer para difundir los deportes de aguas blancas?

Como deportista me gusta tratar de tener los mejores resultados durante el año y después, cuando vuelvo a Chile, trato de difundirlo a través de los mismos eventos que se están haciendo. Ir a Sernatur, conversar con ellos, difundir a través de Internet: trato de involucrar a más gente que se meta en este deporte. Yo he enseñado a muchos niñitos a remar, para que aprendan el kayaking y para que el número de kayakistas crezca. Y así es como realmente ha funcionado en todos los países que tienen el deporte del kayak muy alto. Hay que hacer hartos eventos, dar premios, y motivar mucho a los niños, a todos los jóvenes realmente, para que quieran seguir practicando el deporte. Desde el Club Escualos de Cochrane, por ejemplo, han salido chicos súper buenos  para remar, como lo es Jaime Lancaster, kayakista que tiene alrededor de 18 años y está viviendo conmigo en este momento en Pucón,  donde está terminando la Eduación Media. ¡Siempre nos vamos a remar cuando tiene tiempo libre!

¿Qué es lo que más te ha sorprendido en todo este mundo del kayak?

El Freestyle ahora llegó a un nivel que es, olvídate, ¡muy loco!  Se están pasando olas de 10 metros. Y aparte de eso, después de tener la ola, tienen un rápido grado 5. Tienes que saber que después de la ola, si te sales, tienes que correr este rápido enorme y dosificar tu energía para poder salir. Se necesita una capacidad atlñetica tremenda. Para nombrarte dos remadores de Freestyle están Dane Jackson, que es un cabro chico de 18 años, de Estados Unidos; y Ben Marr, un canadiense muy amigo mío, que es el remador de Freestyle que tiene Canadá en olas grandes. En la primavera del año  2013, que  fue como de las más fuertes, todos nos dimos cuenta al nivel loco que ha llegado esta rama. Estos compadres están sacando tres 360, un truco que nunca me imaginé que alguien podía hacer en una ola. La progresión del deporte llegó a un nivel muy alto en muy poco tiempo.

Las compañías están haciendo botes de Freestyle que están muy buenos. Están trabajando en carbono, entonces el bote pesa un cuarto de lo que pesaba un bote de plástico. No son baratos pero si te puedes conseguir uno, te pueden cambiar la vida en esta especialidad del deporte.

¿Qué se aprende en los ríos chilenos que no se aprenda en otros lados?

Tenemos ríos con mucho volumen, tenemos algunas de las cascadas más limpias que existen del planeta, cascadas súper limpias, de 20 a 40 metros. Yo creo que acá en Chile tenemos más de 100 cascadas que se pueden correr. Chile ofrece realmente una variedad de aguas blancas increíble. Si te hablo de acción, por ejemplo, el rio Baker es un rio enorme, el rio con el caudal más grande de Chile. Yo siempre destaco que el país completo es muy angosto,  entonces,  lo que siempre se hace acá, y que no se podría practicar en ningún otro lado del mundo, es remar desde la cordillera hasta el mar. Yo podría correr cascadas increíbles muy temprano en el día, correr un grado V, remar un río con mucho volumen al medio día, y terminar surfeando una ola en el mar, ¡es de película!

¿Qué esperas de este año?

En kayak, quiero trabajar duro en todas las disciplinas y llevarlas a los niveles más altos, tanto el Freestyle, como el Descenso y el Slalom. En cuanto a competencias, deseo conseguir más y mejores resultados en todos los eventos en los que participe.

Me gustaría explorar nuevos ríos en Canadá y Chile, y también realizar eventos audiovisuales relacionados con el kayak de aguas blancas, al igual que clínicas para la gente en los diferentes lugares que visite, para masificar este gran deporte en Chile, que tiene tanto potencial.